25 de noviembre de 1865
La Junta Informativa de Ultramar (o de
Reformas) es convocada por Antonio Cánovas del Castillo, Ministro de Ultramar
(1865-66) para el Gobierno español.
El propósito de jure de la Junta, como lo sugiere su nombre, era recolectar
información precisa y actual (en aquel tiempo) sobre el estado de las
posesiones coloniales de España para luego implementar políticas (en las
colonias) consideradas necesarias o beneficiosas.
Diciembre de 1865
Segundo Ruiz Belvis es elegido al puesto de comisionado,
junto a cinco otros, en representación de Puerto Rico frente a la Junta
Informativa de Ultramar. Entre los cinco se encuentran José Julián Acosta y
Francisco Mariano Quiñones, que junto con Ruiz Belvis constituyen la facción
liberal del grupo representativo.
30 de octubre de 1866
La Junta Informativa abre sus sesiones.
Abril de 1867
La Junta Informativa concluye sus labores.
Mayo de 1867
El Gobierno español promulga una nueva serie de
impuestos sobre la Isla que había sido objeto de gran oposición para los
comisionados puertorriqueños durante sus reuniones con la Junta Informativa en
los meses anteriores.
7 de junio de 1867
Cercanas las tres de la tarde, se desata un
motín entre una porción de los artilleros de la guarnición de San Juan. Los
artilleros habían sido excluidos “de las prescripciones de un Real Decreto
concediendo ciertos beneficios a los artilleros de la Península”. Como bien
será discutido a continuación, este motín fue organizado en su totalidad por
algunos miembros de la guarnición y nada tuvo que ver con el movimiento
separatista o sus adeptos.
25 de junio al 5 de julio de 1867
El General Marchesi, gobernante de mayor rango
en Puerto Rico, emite numerosas órdenes de destierro contra quienes sospecha
fueron responsables de incitar y organizar el Motín de los Artilleros. Estas
órdenes conllevaban el “expreso mandato de salir
inmediatamente de la Isla y presentarse en el término de dos meses ante el
Gobierno en Madrid”.
La lista de los desterrados incluía a Ramón
Emeterio Betances, Segundo Ruiz Belvis, Pedro Gerónimo Goyco, Julián Blanco
Sosa, Carlos Elio Lacroix, Vicente María Quiñones, José Celis Aguilera, Vicente
Rufino Goenaga et al.
Julio de 1867
Betances y Ruiz Belvis, convencidos de la
improbabilidad de que el Gobierno español actuara de buena fe, desobedecieron
la orden de destierro y se escapan de Mayagüez. Su evasión los lleva primero a
Santo Domingo y finalmente a Nueva York.
11 de julio de 1867
El general Marchesi, gobernante de la Isla en
aquel momento, publicó en el periódico La
Gaceta de Puerto Rico una carta circular indicándole a las autoridades
locales que Ruiz Belvis y Betances andaban en la fuga.
A continuación, se presenta un extracto de la
circular según aparece en el libro El
Grito de Lares (Cruz Monclova, 1968).
Habiendo desaparecido
de Mayagüez D. Segundo Ruiz Belvis, Licenciado en Jurisprudencia, y D. Emeterio
Betances, Doctor en Medicina, los cuales debían ser remitidos a disposición del
Gobierno de su Majestad, he dispuesto que se proceda, por la Autoridades
locales a practicar las más activas diligencias para descubrir su paradero, y
conseguido que sea, los envíen a este Superior Gobierno sin la menor demora.
Ruiz Belvis y
Betances, ya en Nueva York, alcanzan a leer la carta circular y otras noticias
sobre su responsabilidad en el Motín de los Artilleros publicadas en el
periódico New York Herald.
3 de agosto de 1867
Ruiz Belvis y
Betances dirigen una carta al director del New
York Herald en la cual rechazan las acusaciones en su contra, critican las
arbitrariedades del gobierno colonial y exponen su convicción de que era
“inútil gastar tiempo, trabajo y dinero en esperar buena fe del Gobierno
español”.
Agosto de 1867
Estando en Nueva
York, Ramón Emeterio Betances y Segundo Ruiz Belvis, por conducto del doctor José
Francisco Basora, establecieron relaciones “con los núcleos revolucionarios antillanos
que agitaban la insurrección en las Antillas españolas, y, particularmente, con
[…] [la] Sociedad Republicana de Cuba y
Puerto Rico”.
La Sociedad tenía
operaciones en Filadelfia y Nueva Orleans en adición al capítulo de Nueva York.
Entre sus sostenedores se encontraba el escritor y político chileno Benjamín
Vicuña Mackenna, “enviado […] por su país en comisión especial, a raíz de la
guerra entre Chile y España, para colaborar con la Sociedad Republicana”.
Betances y Belvis se
vieron inspirados por las actividades de la Sociedad. El dúo decidió entonces
dedicarse completamente a gestionar la independencia de Puerto Rico; un tiempo
más tarde, elaboraron un plan de lucha. De acuerdo con el plan, Betances se establecería
en un sitio cercano “desde donde [pueda impulsar] la organización conspirativa
en Puerto Rico”. Ruiz Belvis viajaría, junto a Mackenna, a Chile para obtener
el apoyo del gobierno chileno en la lucha de independencia puertorriqueña.
Septiembre de 1867
Betances llega a
Santo Domingo y establece su “base de operaciones” principal. El distinguido
médico después comienza una serie continua de viajes entre Santo Domingo y San
Tomas en los cuales “hizo circular armas, municiones e incluso proclamas”.
27 de octubre de
1867
Ruiz Belvis llegó a
Valparaíso, Chile, y, con la ayuda de Mackenna, “inició sus gestiones con el
más lisonjero éxito”.
4 de noviembre de
1867
Segundo Ruiz Belvis
fallece en el hotel donde se estaba hospedando en Valparaíso, Chile. A falta de
un acuerdo concreto y bajo presión de Estados Unidos, Chile termina desistiendo
de apoyar el movimiento separatista puertorriqueño.
Referencias
Cruz Monclova, L.
(1968). El Grito de Lares. San Juan, Puerto Rico: Instituto de Cultura
Puertorriqueña.
Geigel Polanco, V.
(1976). El Grito de Lares: gesta de heroismo y sacrificio. Rio Piedras,
Puerto Rico: Antillana.
Silen, J. A.
(1972). Historia del Grito de Lares. Rio Piedras, Puerto Rico: Ediciones
Kikiriki.
Wagenheim, O.
(1992). El Grito de Lares: sus causas y sus hombres. Rio Piedras, Puerto
Rico: Ediciones Huracan.